Desde CNT-AIT Madrid queremos trasladar nuestro pésame a la familia, amigxs y compañerxs de Belén, que la tierra le sea leve. Estamos consternadxs ante su muerte. Nadie debería morir trabajando.
Pero también estamos consternadxs ante la ola reaccionaria que ha inundado las redes sociales estos días intentado utilizar la muerte de Belén como excusa para criminalizar (aún más) a los chicos y chicas que habitan los diferentes recursos de protección y reforma. Que si han sido MENAS, que si hace falta más mano dura con estxs chicxs, que si habría que bajar la edad para entrar en prisión, que si hacen falta más vigilantes en los pisos y centros… Basta ya. Es preocupante que desde el ámbito de lo social estemos perdiendo el foco y nos desviemos de la raíz del problema. No necesitamos centros de menores con personal de seguridad, contenciones y pluses de peligrosidad. Necesitamos centros y condiciones dignas tanto para las infancias como para las personas trabajadoras, donde prime la pedagogía y no las dinámicas carcelarias.
Por otro lado, no queremos pasar por alto cómo se invisibilizan las muertes de chavales en centros de menores como el caso de Ilias, cuyo caso fue archivado en varias ocasiones, o como los de tantos otrxs menorxs que han sufrido vejaciones y malos tratos. No se trata de hacer comparaciones, sólo queremos señalar lo que tienen en común todas estas muertes: que ni a la administración ni a las empresas en las que ésta delega la gestión de los diferentes recursos les importan una mierda las vidas de lxs trabajadorxs y menos aún la de lxs chavalxs.
El Sistema de Protección de Menores no funciona, pero no porque lxs chavalxs sean casos perdidos, violentxs, irrecuperables, etc. Nunca han funcionado porque las dinámicas que se establecen son insostenibles y nada tienen que ver con lo que cualquier trabajadora del sector pudiera aceptar como pedagógico y digno. No funcionan porque su fin último no tienen nada que ver con la protección, sino que simplemente cumplen una función de control social. Y de paso, sirve para que unas cuantas empresas se enriquezcan a costa de la vida de chavalxs y trabajadorxs.
No podemos quedarnos de brazos cruzados frente a tantas injusticias. La única forma de plantar cara a los responsables de todo esto pasa por organizarnos desde abajo y sin intermediarios. Luchando para que en el sistema de protección de menores haya unas condiciones que respeten la dignidad de los chicxs y lxs trabajadorxs.
Sección Sindical CNT-AIT en Fundación Diagrama
